restaurante con pequeño comedor interior, otro comedor con terraza al aire libre al lado del lago pero nos dijeron que no lo atendíamos, así que terminamos en la terraza que han cubierto con una tienda, donde las mesas son muy malas, sin respetar la distancia por el covid, sólo 2 separado por una pantalla, tienen una carta variada con pimientos típicos andaluces, segundos también tienen un menú del día para elegir 21,80