Llevo muchos años yendo, pero la experiencia de hoy ha sido mala. Hemos pedido algunas papas de brava entrantes y han llegado crudo dentro que ni siquiera puede ser perforado. Le dijimos al camarero y nos dijo que nos trajo otros. En el momento en que las mismas papas aparecen de nuevo en la mesa, y cuando vimos que no las comíamos, el camarero regresa y nos dice que son otras papas nuevas, que las anteriores las han probado y fueron duras, que teníamos razón y eran crudas. Después de hacerle ver que las papas que nos habían puesto en el momento eran las mismas y que ya había algunas salidas, se dio cuenta de que el otro camarero, que nos ha servido, podría haber sido confundido. Entonces tenemos unas patatas nuevas que tampoco estaban bien hechas. Lo que me parece horrible es que hemos sido devueltos, aunque por error, por algunas papas que han estado intentando un camarero, y más con el tema del covidio, porque lógicamente antes de la duda hemos probado de nuevo. Y primero de todo este desastre, por supuesto, nos han cobrado las papas. No voy a volver, no se puede tratar así a los clientes y mucho menos comprometer estos fallos con una pandemia.